21 noviembre 2006

Nunca es suficiente tiempo...

Nunca es suficiente tiempo.
Nunca es suficiente tiempo el que dedico a pensar, a reflexionar, a orar, a mirarme dentro... Siempre rodeado de ruido, de relojes que me enseñan los dientes, de luces intermitentes y de imagenes en movimiento.
Tampoco es suficiente el tiempo que paso con la gente que quiero, con los que me importan, con los que me hacen feliz y me ayudan a crecer... Un cafe, una cena, un correo o ver una película no bastan para sentirme satisfecho, y sin embargo no dispongo de otra cosa.
Nunca es suficiente el tiempo de que dispongo para hacer mi trabajo, para hacerlo al menos como me gustaría; la presión pesa demasiado, y el tiempo pasa ante mi creciente lista de tareas pendientes.
Nunca disfruto de todo el tiempo que desearía para aprender, para estudiar cosas nuevas, para leer poesía y relatos que me hagan soñar, para volar frente a una pantalla de cine... Y nunca es suficiente tiempo el dura mi canción favorita.
Nunca es suficiente tiempo el que duran mis viajes, mis excursiones... y eso me arrastra a desear nuevos viajes que tampoco serán suficiente. Viajar sólo es ya forjar el deso de un nuevo viaje.
Nunca es suficiente el tiempo que me queda para escribir, para deslizar el lápiz sobre un papel y verbalizar lo que siento, y para poder compartirlo.
Nunca paso suficiente tiempo en las montaña, entre sus árboles, prados y rios, y bajo sus cielos azules. Siempre llega antes de lo deseado la hora de volver...
Y nunca es suficiente mi tiempo de descanso, de paz, de soledad.
Y un reloj me enseña de nuevo sus fauces, y me da la razón...

7 Comments:

Blogger MadJavi said...

Hola a todos!!!
Perdon por tanto retraso en volver a casa, pero ya sabéis...
¡¡¡ NUNCA ES SUFICIENTE TIEMPO!!!
Besos a todos.

21 noviembre, 2006 00:31  
Anonymous Anónimo said...

Sí. Tienes toda la razón: el mundo es tan fabuloso que el tiempo nunca es suficiente.
Que gusto tenerte de nuevo.
Un abrazo.

21 noviembre, 2006 10:23  
Blogger pon said...

Si ya lo decía Jack Twist....

21 noviembre, 2006 11:03  
Anonymous Anónimo said...

más que enseñarme los dientes, los relojes me han pegado un "bocao" alguna vez...
ánimo javiiii!!! y ya que estás, escríbeme algo anda... que ya nadie visita mi blog! (es cierto que tampoco lo merece mucho, sobre todo si lo comparo con el tuyo, pero bueno...)

21 noviembre, 2006 13:25  
Blogger Ana said...

A mi reloj alquien le dijo: Persiguela y no pares hasta que la agarres.
Huyo y a veces me da tiempo a hacer algo que me gusta pero el tiempo pasa y me sigo preguntando ¿Que he hecho?
No lo podrías haber definido mejor, nunca es sufuciente tiempo.

21 noviembre, 2006 18:34  
Anonymous Anónimo said...

El tiempo es como el agua, se nos escapa de las manos y no hay forma humana de pararlo, siempre andamos sedientos.

21 noviembre, 2006 20:44  
Anonymous Anónimo said...

El tiempo, ese bien tan preciado..

23 noviembre, 2006 19:02  

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